Tener un mal día volver


Podés considerar que has tenido un mal día si...

  • Tu mujer te dice: "Espero que este hijo que estoy por parir, lo quieras como si fuera tuyo".

  • Tu hija te dice: "Papá: descubrí que es mentira eso de que si hacés el amor de parado los espermatozoides no te llegan y evitás el embarazo".

  • Dios al fin te señaló... pero te metió el dedo en el ojo.

  • Encendés el televisor y los noticieros muestran rutas de emergencia para abandonar la ciudad.

  • Tu hermano gemelo olvidó tu cumpleaños.

  • Llegás a la oficina y tu jefe te dice que no te molestes en quitarte el abrigo.

  • Tenés una cita a ciegas... con tu ex-esposa.

  • Te pusiste los dos lentes de contacto... en el mismo ojo.

  • Tu esposa te dice "Buenos días, Carlos" y tu nombre es José.

  • El ave que canta en tu ventana todas las mañanas es un cuervo.

  • Llamás a 'prevención de suicidios' y te dejan en espera.

  • Es más caro llenar de combustible tu coche que tu coche en sí.

  • Tenés que pedir prestado de tu Visa para pagar tu Mastercard.

  • Una unidad móvil de Mauro Viale golpea a tu puerta.

  • Querés ponerte las ropas que usaste en la fiesta de anoche, y no están.

  • Te despertás y descubrís que tu cama de agua se reventó, y luego te acordás que no tenés cama de agua.

  • La bocina de tu auto se traba y suena constantemente mientras vas detrás de una banda de motociclistas en la autopista.

  • Te despertás y los frenos de tus dientes se han enredado entre ellos.

  • Llegás al trabajo y te das cuenta de que tu falda se había atorado con tus pantimedias (o medibacha).

  • Te das cuenta de que tenés un tampón en tu oreja, y no podés encontrar tu lápiz.

  • Tu perro de juguete te gruñe.

  • Tu esposa cambió el "¿Cómo estás?" por el "¿Encontraste trabajo?".

  • Te ponés el corpiño al revés... y te queda mejor.

  • Te despertás boca abajo... y lo primero que ves es asfalto.

  • La chica con la que has estado saliendo, comienza a parecerse a tu mujer.

  • Tu torta de cumpleaños se destroza... debido al peso de todas esas velas.

  • Tu mujer se despierta más mimosa que nunca y a vos te duele la cabeza.

  • Tu hija de 17 años sigue diciendo que no fue un accidente... aún en el quinto mes de embarazo.