- Reúnanse todas las personas en un solo lugar. Recomendado: debajo de los marcos de las puertas.
Así es más fácil que los rescatistas encuentren todos los cuerpos de una vez y no pierdan tiempo buscando por aquí y por allá.
- Aguante la respiración.
Luego se acaba el oxígeno dentro de los escombros.
- Mantenga la calma.
De todos modos... ya fue.
- Tenga a mano una identificación.
Hay que cooperar para la identificación de cadáveres.
- No utilice los elevadores, ni escaleras.
Igualmente va a llegar a la planta baja o al sótano.
- Si está ingiriendo alimentos, deséchelos.
Con todo el tiempo que va a pasar para que lo encuentren, se pueden descomponer y producir mal olor, lo que puede confundir a los perros de rescate.
- Si sobrevive entre los escombros, no grite.
No gaste energía, no lo van a escuchar y puede despertar el pánico a otros.
- Si sobrevive entre los escombros y vuelve a temblar, no se mueva de su lugar.
De todos modos no puede, y además podría atascarse aún más.
- Si sobrevive, espere a ser rescatado y entreténgase con algo.
Póngase a contar los cadáveres que hay alrededor, abajo y encima de usted. (Ver punto 1)
- Busque a los arquitectos, ingenieros, albañiles y peones que construyeron el edificio donde usted se encontraba.
Demándelos, súbalos a la montaña rusa y tíreles rocas en la cabeza para que vean lo que se siente.
Otras recomendaciones adicionales:
- Si está en un edificio o casa, tenga a mano siempre una bolsa plástica negra de su tamaño, y cuando comience a temblar métase en ella, ahorrándole el trabajo a los rescatistas.
- Siempre tenga a mano medio kilo de Purina (comida para perros), para que los perros de rescate lo localicen más rápido en medio de los escombros.
- Si va en su vehículo atravesando un puente y éste por el temblor se desmorona junto con ud., colóquese el cinturón de seguridad ya que así los pedazos de su cuerpo no quedarán desparramados por ahí.
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